Me hubiera gustado no dejarte ahí otra vez, sola, cansada por el paso del tiempo y por tu vida frustrada. Ojalá pudiera decirte que estaré contigo cada tarde de este eterno invierno, haciéndote vibrar con algo animal, tan solo entre tu y yo.
Solo espero que con la clara luz de cada mañana, un rayo de sol pueda ayudarte a entender que si no fuera por amor no te habría abandonado, eres mi compañera de fatigas, de lloros y alegrías, y no puedo enloquecer contigo si no tengo fuerzas, te mentiría a ti, a mi, a nosotros.
Queda mucho por dar de nosotros, instantes de euforia, y se que solo llegarán si ambos somos felices, por eso, no es un adiós, tampoco un hasta luego o pronto, tan solo es un volvernos a conocer, con un recuerdo del pasado, y con un escenario diferente.
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